domingo, 14 de marzo de 2010

Hisop, Barcelona



Hisop, 9 de marzo de 2010

Si mal no recuerdo Hisop, tiene abiertas sus puertas desde 2001, los suficientes como para ser una de las ofertas más sólidas de la ciudad Condal. Había pasado ya demasiado tiempo desde mi última visita y una publicación de otra “blogguera”, Marta, http://www.barcelona-malagacooking.com/ , cuyo “blog” recomiendo encarecidamente me hizo descolgar el teléfono para hacer la pertinente reserva.

Tras pasar lo que en su día fue una de las entradas más modernas de Barcelona, el local, diáfano, no demasiado grande, con suficiente espacio entre mesas, permanecía igual que en mi última visita. La sala muy simple (en el sentido más positivo del termino), decorada en blanco y rojo, techos altos y una zona con bóvedas de ladrillo. Las mesas montadas en su mínima expresión: dos vasos, dos servilletas, una rosa, y un punto de luz. Los platos y las copas vendrán cuando sean necesarios.

La recepción por parte de la maître/sommelier, Raquel, muy correcta. Se nos informó de la oferta gastronómica del local: la carta, no con demasiados platos pero muy bien seleccionados, a unos precios correctos; el menú degustación y el menú de noche a un precio de 25 €. Un regalo, como vereís más adelante. Optamos por está ultima opción.

La carta de vinos muy bien seleccionada no muy extensa y cubriendo todos los bolsillos y ocasiones.

Vinos y demás.

Garnacha de fuego 2008, tinto joven, Garnacha tinta, 14 %. Bodegas Ateca. D.O. Calatayud. 14 €. La elección fue a raíz de la bódega, Ateca, ya conocida por nosotros.

El Vino de color cereza picota, muy vivo y limpio, ribete intenso casi violáceo, lágrima pesada. Nariz de intensidad media, con recuerdos a ciruela seca, frutas maduras y alguna nota balsámica. En boca, estructurado, fácil de beber y muy goloso, las mismas sensaciones que en nariz más algún recuerdo mineral. Un vino muy correcto.

Calatayud es una denominación que ha dado un cambio radical, y que esta produciendo vinos muy interesantes que pasan desapercibidos para personas que se dejan llevar únicamente por el prestigio o la fama de determinadas marcas y D.O. a la hora de seleccionar un vino.

1 Agua San Pellegrino, 3,50 €

El pan. Un surtido de panecillos individuales, de nueces, aceitunas negras y blanco. Todos ellos muy buenos, con una miga húmeda y ligera, a destacar el de nueces al estilo de un briox.

Aperitivos.

Mejillón de roca al vapor con puré de coliflor. Excelente textura del mejillón, sabor y cremosidad del puré también perfectos. Redondeaban el plato una brunoise de manzana granny smith, limón y un aceite de perejil. Un aperitivo muy acertado.

Ventresca de atún con berenjena ahumada. En la base del plato encontramos la berenjena con un intenso sabor a ahumado, encima el dado de ventresca de atún perfectamente confitado, aderezado con una gota de salsa de soja y acompañado por una picada de rúcula y pistacho, la picada en consistencia recordaba a un pesto, emulsionado, se distinguían perfectamente ambos sabores.

Primeros.

Ensalada de codorniz escabechada. Compuesta por el escabeche de codorniz, muy suave en vinagre, sobre unas lentejas verdes “al dente” y una vinagreta de pera y oporto más que interesante. Para terminar un mezclum formado por distintas hojas (acelga roja, mostaza, tatsoi, lollo rosso, radiccio, escarola frisse…). Un conjunto muy correcto.

Arroz cremoso de vieiras. La técnica del risotto perfectamente ejecutada, al igual que la cocción de la vieira, únicamente con esto el plato era muy bueno. Lo remataban una finísima brunoise de panceta muy crujiente, una espuma de huevo (que costaba un poco identificar) y trufa rallada, lo que hacía del plato más que sobresaliente.

Segundos.

Merluza, sopa de alcachofa y salteado de cama-grocs. La merluza cocinada a la plancha en su punto justo, bañada por la crema de alcachofa y guarnecida con un salteado de camagrocs (castellano, trompetas amarillas) tal vez con un punto de sal muy marcado. Decoraban el plato unos tirabeques, a la inglesa, que aportaban una nota dulce junto a una textura crujiente y un aire de cebolla tierna. Un conjunto notable.

Carré de cordero con chutney y salsa de regalíz. Excelente cordero, servido con un punto bajo de cocción, el comensal lo prefería más hecho, pero tanto a él como a la maître se les olvido puntualizar la cocción de la carne. El chutney de manzana y frutos secos aportaba unas notas agridulces que tan bien ligan con el cordero, junto con el jugo de cordero perfumado con regaliz. Un aire de curry terminaba de aportar sabores del oriente al plato.

Postres.

El menú incluía como postre un brownie, se nos dió la oportunidad de solicitar postres diferentes si nos apetecía

Mojito, se nos sirvió como pre-postre. Una infusión de menta con un helado de lima y ron. Cumplió su cometido a la perfección. Muy refrescante y agradable.

Bizcocho cremoso de pistacho con sopa de rúcula. Este postre nos lo aconsejo la maître y fue todo un acierto. Un bizcocho con un sabor muy intenso a pistacho, su interior casi líquido, acompañado por una refrescante sopa de rúcula, un helado de lima-kefir y unos pistachos rebozados, muy crujientes. Uno de los mejores y más sorprendentes postres que he probado recientemente.

Cremoso de chocolate y helado de mango. Un coulant de chocolate, excelente, muy potente, acompañado por un no menos bueno sorbete de mango, pulpa de fruta de la pasión, que ayudaba a equilibrar el plato de manera extraordinaria con su acidez y una salsa de la perfumada pimienta de jamaica. Nos sorprendió el equilibrio de sabores y la complementariedad de ellos. Otro postre para no pasar por alto.

Brownie de chocolate. Tal vez el único postre al que le puedo poner una pega, ya que al bizcocho le faltaba algo de humedad, pero quedaba compensada por una espuma de coco y un helado de piña asada increíble.

Café y demás.

El apartado dulce no terminaba aquí, junto con un café (2,25 €), aparecieron los petit fours.

Infusión de tónica (en las probetas), realizada con agua tónica y una infusión de la planta.

Aceitunas de Aragón caramelizadas y rebozadas en azúcar lustre (bol blanco de la izquierda de la foto).

Gominolas de gin-tonic, vaporizadas en el último momento con ginebra, delante del cliente.

Crema de manzana con gelatina de té y galleta (en la cucharilla), y por último unas Trufas de chocolate con aceite de trufa que encontramos excelentes.

Para terminar…

Felicitar al equipo de cocina encabezado por Oriol Ivern, por la creatividad y solidez de sus platos, desde los aperitivos a los postres. Sorprende el equilibrio que se encuentra entre los platos de la carta y los postres algo no muy habitual en los restaurantes de hoy día, que tienden a “discriminarles”. Hace hincapié en el tamaño de las raciones de los platos, más que generosas.

El servicio de sala liderado por Raquel, supo transmitir comodidad y unos conocimientos muy elevados de su profesión.

Sinceramente, espero que está formula para atraer a la clientela les funcione, los 25 € que cuesta el menú en cierta manera son hasta simbólicos, la relación calidad precio es increíble. Recordar que este menú está a disposición de los clientes de lunes a jueves en los servicios de medio día y noche.

La factura para dos: 74,63 €, precio por persona: 37,5 €. Comentar que uno de los postres fue invitación de la casa.

HISOP, Pasage Marimón, 9
 Tel: 93 241 32 33
Horario:
De 13h30 a 15h30 y de 20h30 a 23h
 Día de cierre: sábado mediodía y Domingo


martes, 2 de marzo de 2010

La Burg, 27 de febrero de 2010



La Burg, 27 de febrero de 2010

Fue gracias al Blog http://www.estocomo.com/ como me llegó la noticia de esta Hamburguesería ubicada en el Barrio Barcelonés de Sarriá. El Local con una decoración entre lo rústico y moderno sin acabar de definir, pero muy agradable. La iluminación tenue y bien situada.

Al ser sábado acudimos previa reserva, tal y como aconseja mi compañero de “Estocomo”, lo cuál fue un acierto pues el local se puso a tope.

La carta cuenta con varias ensaladas, de queso de cabra, caprese, remolacha y atún, y del tiempo, todas ellas entorno a los 7 €.

El apartado de Hamburguesas con once tipos en la carta y dos como sugerencia, todas ellas entre los 6 y los 15 €. Para todos los bolsillos. Todas ellas elaboradas con carne de buey de raza Parda y diferentes pesos. La calidad de la carne muy buena y un picado más que correcto.

Como acompañantes encontramos, patatas fritas, las patatas bravas, las “papas arrugás” y nachos, con unos precios entre los 2,70 a 4,2 €

Para terminar, en la carta aparecen cuatro postres: Brownie, Pastel de manzana, Pastel de Zanahoria, y Sacher, todos entre 3,8 y 4,20 €. Comentar que además de estos postres que figuran en la carta la camarera nos “cantó” unos cuantos más.

Termina la oferta una selección de vinos, cervezas y refrescos como era de esperar.

Nosotros degustamos lo siguiente…

Bebidas.

Martivilli 2008, 100% Verdejo, D.O. Rueda. 13 €. Uno de los clásicos blancos de Rueda. Un blanco muy correcto con toda la expresividad y tipicidad. Amarillo con destellos verdosos muy brillante. Nariz herbácea, con notas de piña verde. En boca equilibrado, acidez correcta, sabores herbáceos una vez más, las notas metálicas y amargas típicas. Bastante persistente.

2 Coca-Colas. 3,80 €

2 aguas con gas. 3,80 €

Aperitivos o acompañantes.

Unas patatas bravas, 3,20 €. Casi correctas, tenían más de allioli que de salsa brava, en otros términos era “allioli bravo”, y las patatas estaban un tanto quemadas.

Papas arrugás”, con un mojo verde, que pasaron sin pena ni gloria, la salsa a penas tenía sabor cuando en este caso ha de salir de forma notoria el pimiento y el comino o el cilantro según el “mojo” que intentasen hacer.

Las Hamburguesas….

Hamburguesa Gourmet. 15,50 €. Una base de pan de “pagés”, una hamburguesa de buey de 200g, como anoto arriba de muy buena calidad y picado de la carne, esto se repite en las posteriores hamburguesas. Acompañaban a la carne, una loncha de foie bastante correcto y cebolla confitada, que a mi parecer le faltaba un punto de caramelización, sal y especias. Desde mi punto de vista a la hamburguesa también le faltaba alguna salsa y hierbas que le confiriesen un poco más de “vidilla” y alegría.

Hamburguesa de Cordero. 10,80 €. 125 g de carne de cordero muy buena, pero a la que le faltaba una vez más algo de aderezo y condimentos. Acompañaban a la hamburguesa, cebolla a la parrilla, lechuga, tomate y salsa de yogurt.

Hamburguesa de quesos. 8,80 €. 150 g de carne de buey, cebolla confitada, emmental y brie. Se pueden aplicar las mismas valoraciones sobre la hamburguesa, en este caso acompañada de estos dos quesos, creo que más que conocidos por todos. Una variación en los quesos tal vez sería más acertada.

Hamburguesa Champion. 8,80 €. 150 g de carne de buey, cebolla confitada, champiñones y salsa de champiñón. La carne “ídem” a las anteriores, los champiñones salteados y la salsa correcta aunque un tanto falta de potencia. Tal vez unos champiñones frescos laminados hubiesen aportado, frescura y novedad al conjunto.

Los postres.

Pastel de queso, Sacher (sobre estas líneas) y Pastel de Zanahoria, Brownie (foto inferior). Todos ellos a 4,20 € a excepción del pastel de zanahoria a 3,80 €.

Los cuatro postres de corte industrial, pero muy correctos iban acompañados de un “coulis” de frutos rojos.

1 café. 1,30 €

En resumen, un local con una oferta que quiere destacarse por encima de una hamburguesería tradicional, pero que se queda de momento a mitad de camino, con un producto interesante pero que le falta la “chispa” o el “detalle” diferenciador final, que tal vez pudiera pasar por una oferta de salsas más elaboradas, unas variedades de lechuga o hierbas que se salgan de la pauta, una propuesta mas atrevidas de maridaje…

Como ya apuntaba, por ejemplo la cebolla confitada que aparece en varias de las hamburguesas, es correcta, pero le falta ese punto que te haga decir “que cebolla confitada más buena!”.

El servicio durante todo el pase fue muy correcto, un poco lento a la hora de tomar nota e iniciar el servicio.

Total de la factura: 87,70 €. Precio por persona: 21,93

LaBurg, Hamburguesería
Passeig de Sant Joan Bosco, 55 Barcelona
Tel. 93 205 63 48